¿Cuáles son las diferencias entre estos trastornos de ansiedad?
El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es una afección que puede ocurrir después de que una persona ha experimentado un evento traumático que involucra miedo intenso y amenaza de lesión corporal o muerte. Los ejemplos incluyen el combate militar, la agresión sexual o los desastres naturales.
La persona puede no haber experimentado el evento de primera mano. Presenciar un factor de estrés traumático, como la muerte accidental de una persona o un ataque a alguien, puede provocar síntomas. El trastorno de estrés postraumático también puede ocurrir cuando una persona ha escuchado sobre los detalles de la exposición de otra persona a un trauma, incluso sobre la trágica muerte de un amigo o miembro de la familia o si descubre que un ser querido ha sido diagnosticado con una afección terminal.
Las personas con trastorno de estrés postraumático suelen padecer trastornos concurrentes relacionados con la ansiedad , depresión y problemas de abuso de sustancias. No es raro que a una persona con TEPT también se le diagnostique un trastorno de pánico. Sin embargo, cada condición tiene su propio conjunto de síntomas, criterios de diagnóstico y opciones de tratamiento. Las diferencias entre el trastorno de pánico y el trastorno de estrés postraumático se pueden determinar teniendo en cuenta varios factores:
1 - Síntomas
- Las personas con trastorno de pánico experimentan muchos síntomas físicos asociados con ataques de pánico, como temblores, temblores, sudoración, dificultad para respirar y dolor en el pecho . Estos sentimientos somáticos pueden llegar a ser tan graves que la persona pueda creer que está perdiendo el control, enloqueciendo o teniendo un problema médico grave, como un ataque al corazón. Para las personas con trastorno de pánico, estos ataques de pánico pueden volver a suceder y, a menudo sin previo aviso, lo que puede hacer que la persona viva con miedo debido a la anticipación de su próximo ataque.
- Los síntomas del TEPT se pueden dividir en tres categorías: volver a experimentar el evento, conductas de evitación y aumento de la excitación. Los síntomas de reexperimentación incluyen pensamientos intrusivos, pesadillas y recuerdos del evento traumático. Las conductas de evitación implican alejarse de todo lo que les recuerde el trauma, incluidos los pensamientos, lugares y recuerdos asociados con lo sucedido. Los síntomas de hiperactividad típicamente consisten en sobresaltarse fácilmente, falta de concentración e irritabilidad frecuente.
2 - El papel de los ataques de pánico
- Para tener un diagnóstico de trastorno de pánico , la persona debe experimentar ataques de pánico recurrentes y espontáneos. Los ataques de pánico son una sensación de miedo intenso sin la presencia de un peligro real. Los ataques de pánico a menudo se experimentan con sensaciones físicas, como mareos, náuseas y temblores.
- Una persona con trastorno de estrés postraumático también puede experimentar las sensaciones físicas de ataques de pánico, como palpitaciones, falta de aliento y sofocos. Sin embargo, estos ataques son provocados por la reexperimentación del evento traumático a través de puntos de venta tales como sueños, pensamientos y recuerdos. Los síntomas de hiperactividad presentes en el trastorno de estrés postraumático, como entrar en pánico después de escuchar un ruido fuerte, también pueden causar ataques de pánico.
3 - Comportamientos de evitación
- Tener un ataque de pánico puede ser una experiencia aterradora. Las personas con trastorno de pánico a menudo se asustan al pensar en su próximo ataque inminente. Este temor a futuros ataques puede llegar a ser tan poderoso que la persona desarrolle agorafobia , un miedo a tener un ataque de pánico del cual sería difícil o vergonzoso huir. La persona evitará los lugares donde cree que ocurrirán los ataques y creará una zona segura, en la que limitarán su exposición a ciertas áreas que sienten que no tendrán un ataque.
- Las personas con TEPT muestran muchos síntomas de evitación . A menudo evitan lugares, actividades, pensamientos, conversaciones, personas y otros estímulos que les recuerdan el evento traumático. Una persona incluso puede experimentar pérdida de memoria del evento. Una persona con trastorno de estrés postraumático también puede distanciarse de los demás, limitar las actividades, le resulta difícil expresar una gama completa de sentimientos y perder la esperanza sobre su futuro.
4 - Tratamiento
Afortunadamente, hay muchas opciones de tratamiento para el trastorno de pánico, que incluyen medicamentos y psicoterapia. Estas formas de tratamiento también pueden tratar eficazmente el TEPT. Hay varias clases de medicamentos que pueden usarse para la reducción de los síntomas. Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) son una clase de antidepresivos comúnmente recetados para reducir la ansiedad, la intensidad de los ataques de pánico y la hiperactivación. Las benzodiazepinas son un tipo de medicamento contra la ansiedad que se prescribe por su efecto sedante.
La terapia conductual cognitiva ( TCC ) es una forma común de psicoterapia que puede ayudar a disminuir los síntomas del trastorno de pánico o el TEPT. Por ejemplo, la desensibilización sistemática es una técnica de TCC que implica una exposición gradual guiada por el terapeuta a situaciones que provocan ansiedad. La persona aprende a manejar su miedo en estas situaciones a través de técnicas de relajación. Al practicar continuamente la exposición gradual y la relajación a través de la terapia, ciertos estímulos que una vez desencadenaron ansiedad eventualmente ya no causarán nerviosismo extremo y miedo en la persona.
Tanto el trastorno de pánico como el trastorno de estrés postraumático tienen síntomas intensos que pueden reducirse con éxito mediante un tratamiento adecuado. Es importante recibir tratamiento al inicio de cualquiera de las afecciones para disminuir las probabilidades de que el trastorno empeore. Por ejemplo, al tratar los síntomas de hiperexcitación del TEPT, se puede prevenir el desarrollo de ataques de pánico. Además, las posibilidades de convertirse en agorafóbico se pueden reducir al recibir ayuda para el trastorno de pánico y los ataques desde el principio.
Fuentes:
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