Cómo desarrollar una voz fuerte cuando tienes un desorden de ansiedad social

Las personas que están lidiando con el trastorno de ansiedad social (SAD) a menudo tienen problemas de voz.

Las personas con SAD tienden a utilizar una voz silenciosa y débil y pueden murmurar. La tensión que resulta de la ansiedad social suele ser la culpable, ya que esto puede interferir con la presentación de su mejor voz.

Si es justo o no, tener una voz débil afecta la forma en que otras personas te ven.

Su voz establece el tipo de relación que desea tener con alguien, ya sea de amistad y aceptación o de ser distante.

La mayoría de las veces, aquellos con trastorno de ansiedad social dan la impresión a través de su voz de que quieren que los dejen solos.

Si bien su voz está parcialmente influenciada por el tamaño de sus cuerdas vocales, es posible mejorar varios aspectos de su voz para crear una impresión positiva cuando habla.

En resumen, su objetivo debe ser desarrollar la mejor versión posible de su propia voz: una que sea

Si tu autoestima es tan baja que no crees que mereces tener esa voz tan grande, plena y rica, piénsalo de esta manera. Desarrollar su mejor voz en realidad es útil para los demás, ya que les facilita conversar con usted.

Analiza tu voz

El primer paso para mejorar su voz es analizar dónde podría ser deficiente debido a su ansiedad social.

Puede completar este paso al solicitar la ayuda de otra persona o al grabar su propia grabación de audio o video durante una conversación.

Para analizar su voz, use el perfil de voz que Toastmasters International encuentra al final del manual. Repase cada ítem y califique su voz en la escala de 1 a 7, donde 1 es más negativo y 7 más positivo.

Puntuaciones de 4 o menos indican áreas en las que puede ser necesaria una mejora.

7 características problemáticas del habla

Una vez que haya completado su perfil de voz sabrá las áreas en las que necesita dedicar su atención. A continuación se detallan algunos de los posibles problemas que puede haber identificado y que pueden asociarse con SAD.

1. Monótona: Hablas en un rango muy estrecho de tono, lo que puede hacer que lo que dices suene poco interesante.

2. Demasiado silencio: hablas en voz muy baja, hasta el punto de que otros tienen problemas para escucharte.

3. Murmurando: Mueves los labios muy poco cuando hablas y no pronuncias las palabras con claridad.

4. Demasiado lento: Usted habla a un ritmo excesivamente lento (menos de 120 palabras por minuto), lo que puede hacer que los oyentes pierdan interés.

5. Demasiado rápido: Usted habla a un ritmo excesivamente alto (más de 160 palabras por minuto), lo que puede hacer que parezca nervioso y frustrar a los oyentes.

6. Demasiado bajo: una voz demasiado baja puede ser difícil de escuchar para otros.

7. Demasiado alto: Una voz demasiado aguda o nasal puede hacer que suene nervioso o quejumbroso.

Consejos para mejorar tu voz

1. Postura

Cuando estés de pie, imagina que hay una cuerda imaginaria que tira hacia arriba en la parte superior de tu cabeza. Cuando estés sentado, asegúrate de no quedarte demasiado encorvado.

Una buena postura permite que tus pulmones se llenen correctamente, lo que puede mejorar la calidad de tu voz.

2. Tasa de habla

La velocidad de habla ideal es de entre 120 y 160 palabras por minuto.

Puede determinar su velocidad de voz siguiendo estos simples pasos:

Si encuentra que es un hablador rápido (tasa de más de 160 palabras / minuto), practique la misma sección nuevamente tomando 2 segundos para decir cada palabra.

Si nota que habla con lentitud (califique menos de 120 palabras / minuto), vuelva a practicar la sección leyéndola tan rápido como pueda.

Haga estos ejercicios de práctica regularmente y debería encontrar que su ritmo de habla mejora gradualmente.

3. Quita tu voz de tu garganta

Las personas con trastorno de ansiedad social pueden tener tensión en los músculos de la garganta y la mandíbula.

Aprender cómo relajar estos músculos hará que sea más fácil hablar con una voz que suene placentera, en lugar de una que suene contraída. Es más fácil proyectar tu voz cuando la mueves fuera de tu garganta.

Practique los siguientes ejercicios recomendados por Toastmasters varias veces al día durante unos minutos cada vez:

  1. Bosteza y baja la mandíbula tanto como sea posible. Zumbido con los labios cerrados y la mandíbula suelta.
  2. Con la garganta relajada, repita palabras como "colgar, dañar, carril, principal, solitario, telar".
  3. Masajea los músculos de tu garganta para eliminar la opresión.
  4. Repite sonidos como "nah, nay, nee, no, noo". De nuevo, baja la mandíbula y relaja la garganta.

Mientras practica estos ejercicios, observe cómo se sienten tensadas la garganta y la mandíbula al principio y cómo se relajan gradualmente.

También puedes practicar la relajación de la garganta contando mientras mantienes relajada la garganta y la mandíbula. Haga esto mientras está acostado en el piso, luego mientras está sentado, y finalmente mientras está de pie. Su objetivo debe ser contar hasta 100 con todos los músculos relajados y tomando una nueva respiración cada 5 minutos.

4. Respire del diafragma

Cuando hable, debería sentir que su aliento está entrando desde su vientre, en lugar de ser arrastrado por su garganta. La respiración adecuada significa dejar que su vientre se eleve cuando inhala y caer cuando exhala.

Una voz que se origina en el diafragma ordena la atención y suena más atractiva.

Los siguientes son ejemplos de ejercicios para que pueda mejorar al usar su diafragma cuando respira:

5. Varíe su tono

Su voz debe expresar emoción y convicción en lugar de parecer monótono. Las personas con trastorno de ansiedad social tienden a usar un rango estrecho de tonos cuando hablan, porque se sienten restringidos e incómodos.

Practique variando su tono leyendo en voz alta de un libro o revista y variando el tono de diferentes palabras y oraciones, haciéndolos subir o bajar.

También puedes ampliar el rango de tu voz. Primero, determine su rango cantando junto con las notas en un piano (real o incluso uno en línea funcionará). Encuentra las notas más bajas y más altas que puedas cantar. Luego, trate de ampliar su tono practicando notas cada vez más altas cada día.

6. Articulación

Las personas con SAD pueden murmurar como una forma de evitar ser el centro de atención. El murmullo es como hablar con algo frente a su boca, lo que distrae y frustra a los oyentes.

Articular sus palabras comienza con tomar la decisión de tener cuidado cuando hable. Cuando hables, asegúrate de abrir la boca y utilizar el rango completo de movimiento de tus labios.

También puede hacer algunos ejercicios con los labios, como fruncir y ensanchar los labios, 10 veces más lento y luego 10 veces más rápido.

7. Volumen

Las personas con trastorno de ansiedad social tienden a hablar demasiado bajo, lo que puede hacer que parezcan invisibles o hacer que se pasen por alto durante la conversación. Irónicamente, a medida que comienzas a hablar más alto, incluso puedes descubrir que tu confianza crece y que la ansiedad se reduce.

Además de hablar lo suficientemente alto para ser escuchado, también es importante variar el volumen de su voz para enfatizar. Practica leyendo una sección de texto y variando el volumen de tu voz para enfatizar palabras importantes.

8. Centrarse en la entrega

Cuando hable poco , concéntrese más en su entrega y preocúpese menos por el contenido de lo que está hablando.

Es más importante que hable en voz alta y clara que tener cosas asombrosas que decir, porque después de todo, una pequeña charla se trata de construir relaciones .

9. Obtenga ayuda profesional

Si ha intentado y no pudo mejorar la entrega de su voz, podría valer la pena contratar la ayuda de un profesional.

Puede inscribirse en clases de canto o actuación, o incluso trabajar con un entrenador de voz privado. Solo le llevará una hora desarrollar su mejor voz, además de mucha práctica para asegurarse de que se internalice.

Investigación sobre voz y SAD

Un estudio de 2014 encontró que en una condición experimental que hacía que las personas con TAE se sintieran excluidas, posteriormente mostraron una disminución de la confianza vocal, en contraste con aquellas sin TAE.

Por lo tanto, si tiene un diagnóstico de trastorno de ansiedad social, sea sensible a sus propias reacciones al rechazo. ¿Dejas caer un murmullo bajo si te sientes rechazado? Si es así, tendrá que estar más alerta para estar al tanto de esa tendencia y para aprovechar las nuevas habilidades que ha aprendido cuando se desencadena su ansiedad.

> Fuentes:

> Gilboa-Schechtman E, Galili L, Sahar Y, Amir O. Estar "dentro" o "fuera" del juego: reacciones subjetivas y acústicas a la exclusión y popularidad en la ansiedad social. Front Hum Neurosci . 2014; 8: 147. doi: 10.3389 / fnhum.2014.00147.

> Preston Ni. Cómo fortalecer y mejorar el sonido de su voz oral.

> Instituto de Ansiedad Social. Qué sucede en el grupo de 3 semanas.

> Toastmasters International. Tu voz para hablar