Usar estructuras de vida para aliviar el estrés

Cuando los entrenadores de la vida hablan de "estructuras", generalmente nos referimos a los sistemas en nuestras vidas que optimizan una tarea o proceso. Clases, rutinas, protocolos: todos son tipos de estructuras de vida que nos ayudan a hacer las cosas.

Pasar una noche de juegos con un grupo de amigos, y es una noche divertida; elabore un plan para reunirse para los juegos una vez al mes y decida quién trae los juegos, la comida y las bebidas, y ha creado una estructura de vida que le permite tener esta diversión de forma regular.

Las estructuras de vida funcionan para mantener una vida equilibrada porque una vez que has puesto el trabajo en crear una estructura alrededor de una actividad que es importante para ti, es mucho más fácil mantener esta actividad en tu vida.

Las clases de ejercicios son estructuras de vida que ayudan a mantener el bienestar, contratar un ama de llaves semanal es una estructura de vida que puede eliminar el desorden, y un plan de menú semanal es una estructura de vida que puede ayudarlo a mantener una dieta saludable. Incluso el hecho de guardar una bolsa de gimnasia en su automóvil puede ser una estructura de vida que agilice su capacidad de adaptar los entrenamientos regulares a su cronograma.

Estructuras de vida y hábitos de mantenimiento

Las estructuras de la vida pueden reducir el estrés de la vida al ayudarnos a mantener con mayor facilidad los hábitos positivos.

Esto es importante porque los hábitos son los que impulsan muchas de las actividades en nuestras vidas, ya sea que nos demos cuenta o no. Si adquiere el hábito de consultar las redes sociales cuando se despierta, por ejemplo, puede ser absorbido por media hora de actividades pasadas que serán olvidadas relativamente poco tiempo.

Pero si adquiere el hábito de ejercitarse cuando se despierta ( caminar por la mañana , ¿alguien?), Es fácil gastar esos mismos 30 minutos en ejercicio, lo que puede generar resistencia al estrés y darle la energía para aprovechar al máximo su día.

De manera similar, decidir pasar el tiempo de esta manera en un día determinado puede traer beneficios, pero convertirlo en un hábito puede brindarle los beneficios a largo plazo sin tanta energía como motivación: se volverá más saludable y más flexible hacia estrés sin tener que esforzarse tanto, porque este hábito se sentirá automático.