¿Es el amor duro efectivo en el tratamiento de la adicción?

El amor duro se ha popularizado, pero puede tener consecuencias importantes

El amor duro es una expresión común utilizada para describir cualquier comportamiento que sea un enfoque firme, a veces frío, para manejar las acciones de alguien. Es un tanto controvertido, especialmente cuando se usa en el tratamiento de ciertos trastornos, como la adicción a las drogas u otras conductas adictivas.

¿Qué es el amor duro?

El amor duro es una expresión que fue presentada por primera vez al público por el autor Bill Milliken en su libro, Tough Love , publicado en 1968.

Hay muchas maneras en que el amor duro se usa en el lenguaje cotidiano. Más comúnmente, se usa para describir cualquier tipo de crianza en la que el niño experimenta algunas emociones negativas como parte de un proceso de aprendizaje. Esto puede ir desde un entorno saludable de límites firmes, común en estilos autoritativos de crianza de los hijos, hasta estilos abusivos de crianza en los que la humillación, el menosprecio o la violencia física se utilizan para controlar al niño.

Por ejemplo, un padre puede usar amor duro contra su hijo adulto que no ha conseguido un trabajo. Los padres que practican el amor duro retendrían el pago de las facturas y dejarían que el niño lidiara con las consecuencias, tales como pagos atrasados ​​o cobro de facturas, en lugar de atacar y arreglar el problema. El término se ha vuelto muy popular, pero no se puede usar con eficacia en todas las situaciones, incluida la adicción.

En un ejemplo dañino de amor duro, un padre menospreciaría o lastimaría físicamente a un niño por no obtener una buena calificación o completar sus tareas.

Tener consecuencias puede cambiar el comportamiento, pero este es un ejemplo extremo que puede tener repercusiones negativas duraderas.

El amor duro puede referirse a un enfoque positivo para la crianza de los hijos, en el cual el niño aprende valiosas lecciones, pero no sufre los efectos negativos del abuso, porque no es abusivo y preserva la dignidad del niño.

También se podría aplicar a un enfoque estricto de la crianza de los hijos, en el que la autoestima del niño se ve menoscabada, y están sujetos a abuso físico, emocional o incluso sexual . En ese sentido, el amor duro se vuelve prácticamente insignificante, excepto para denotar alguna incomodidad por parte del niño, y no puede usarse para inferir ni la intención ni la legitimidad del estilo de disciplina del padre.

Amor duro

En particular, el amor rudo ha sido ridiculizado como una técnica peligrosa en el manejo de adolescentes o adultos que luchan con adicciones, como aquellos que se involucran en el abuso de sustancias. Algunos centros de tratamiento usan el término amor duro para referirse a un enfoque severo que rompe la voluntad de la persona. Si bien puede parecer efectivo a corto plazo, en realidad puede empeorar la afección y conducir a recaídas peligrosas más adelante.

El amor duro puede tener su lugar en el tratamiento de la adicción, pero no debe participar sin la participación de un médico o terapeuta. Si tiene un hijo o un ser querido que lucha contra la adicción, busque un terapeuta de adicciones para una consulta sobre cómo puede ayudar a su ser querido. Su terapeuta puede aconsejarle sobre los mejores enfoques y límites para ayudar a su hijo a recuperarse de una manera sostenible.

Fuente:

Szalavitz, M. "Treating Addiction: A Top Doc explica por qué Kind Love Beats Tough Love". Time Magazine, 2012.