La bulimia nerviosa es un tipo de trastorno alimentario que se caracteriza por episodios repetidos de atracones seguidos por el comportamiento para compensar la cantidad excesiva de alimentos que se consumen. Esto puede incluir purga , ayuno, ejercicio excesivo o el abuso de laxantes y diuréticos para evitar aumentar de peso. El ciclo de comer en exceso y luego purgarse puede volverse compulsivo, en cierto modo similar a una adicción a las drogas.
Incidencia de la bulimia en adolescentes
La prevalencia de casos de bulimia en los EE. UU. Es de 12 casos por 100,000 habitantes por año, sin embargo, un estudio europeo muestra que ese número llega al 12% de las mujeres a lo largo de la vida. La mayoría de los bulímicos son mujeres. Pero este es un trastorno alimenticio que los hombres tienden a tener ya que usan el ejercicio excesivo para perder peso y desarrollar músculo. Este trastorno alimentario puede desencadenarse por estrés, dieta ineficaz o como un intento de lidiar con emociones dolorosas o deterioro de la imagen corporal. Los comportamientos de purga hacen que la bulimia sea muy dañina para el cuerpo. Si le preocupa que su adolescente pueda estar sufriendo de bulimia, solicite una evaluación profesional de un médico o profesional de la salud mental .
Señales
La intervención temprana mejora las posibilidades de que los adolescentes recuperen con éxito un trastorno alimentario. Puede ser difícil enfrentar los signos de la bulimia en su adolescente, pero es importante estar atentos para garantizar que los patrones de alimentación de su hijo sean normales.
Sin embargo, hay motivos de preocupación si presencia uno o más de los siguientes síntomas de la bulimia:
- Consumir una cantidad significativamente mayor de alimentos en un período de tiempo limitado que la mayoría de la gente normalmente comería, lo que se conoce como atracones.
- Sintiéndose incapaz de controlar o dejar de comer una vez que comienza un atracón.
- Continúa comiendo incluso si te sientes incómodamente lleno.
- Expresando preocupaciones frecuentes sobre el peso o la forma del cuerpo.
- Experimentar sentimientos de culpa, vergüenza o ansiedad después de comer.
- Purgar los alimentos del cuerpo después de comer en exceso para evitar aumentar de peso y como un intento de recuperar la sensación de control.
- Saltarse las comidas o seguir dietas extremas para 'compensar' las conductas compulsivas.
- Extremo miedo de ganar peso.
- Usar pastillas de menta para cubrirse después de vomitar.
- Irrazonablemente descontento con el tamaño o la forma del cuerpo.
- Uso anormal o abusivo de pastillas para adelgazar o diuréticos con el tiempo para controlar el peso.
- Pasar mucho tiempo en el baño, por lo general vomitando.
- Ejercicio excesivo, en momentos o entornos inapropiados, o incluso cuando está enfermo o lesionado.
El impacto de la bulimia en adolescentes con problemas
La bulimia puede tener un impacto devastador en los adolescentes. Es importante informarte a ti mismo y a tu adolescente sobre los efectos nocivos de la bulimia en el cuerpo, la mente y el alma. Si bien se puede tener una recuperación completa de los efectos físicos de la bulimia, los efectos mentales y emocionales pueden durar toda la vida. Estas son las principales consecuencias para la salud de la bulimia:
- Desequilibrios minerales o electrolíticos
- Función anormal del intestino
- Destrucción del esmalte dental
- Vasos sanguíneos rotos en los ojos
- Anemia
- Convertirse en malhumorado o deprimido
- Abuso de sustancias
- Problemas hormonales
- Mareo
- Fatiga
- Rotura en la pared esofágica debido a vómitos
- Paro cardíaco
- Muerte
Fuentes
Michaela Nagl, Corinna Jacobi, Martin Paul, Katja Beesdo-Baum, Michael Höfler, Roselind Lieb, Hans-Ulrich Wittchen. Prevalencia, incidencia y evolución natural de la anorexia y la bulimia nerviosa en adolescentes y adultos jóvenes. Psiquiatría europea de niños y adolescentes . 2016 Ene 11. pp 1-16