¿Por qué las personas toman alucinógenos?

Las razones por las que las personas prueban los alucinógenos y los posibles efectos del uso

Durante siglos, los alucinógenos o psicodélicos han sido utilizados por personas en muchas culturas para rituales religiosos, por artistas para despertar la creatividad o la recreación. Las razones por las que las personas prueban los alucinógenos son variadas, pero para la mayoría, alteran la percepción, los pensamientos y los sentimientos. Aunque la mayoría no son adictivas, algunas pueden serlo, y puede haber algunos riesgos y beneficios relacionados con el uso de alucinógenos.

¿Qué son los alucinógenos?

Los alucinógenos son una clase de droga que puede causar alucinaciones o sensaciones e imágenes que parecen reales aunque no lo son. Los alucinógenos se pueden encontrar en algunas plantas y hongos o pueden ser hechos por el hombre. El LSD , la psilocibina, el peyote (mescalina), el DMT y la ayahuasca hacen que las emociones se muevan salvajemente y que las sensaciones del mundo real parezcan irreales, a veces aterradoras. Los alucinógenos en la subcategoría de fármacos disociativos incluyen PCP, ketamina, dextrometorfano y Salvia.

¿Cómo funcionan los alucinógenos?

La investigación sugiere que los alucinógenos funcionan al menos parcialmente al interrumpir temporalmente la comunicación entre los sistemas químicos del cerebro en todo el cerebro y la médula espinal.

Algunos alucinógenos interfieren con la acción del cerebro químico serotonina. La serotonina puede afectar el estado de ánimo, la percepción sensorial, el sueño, el hambre, la temperatura corporal, el comportamiento sexual y el control muscular.

Otros alucinógenos interfieren con la acción del glutamato químico cerebral.

El glutamato regula la percepción del dolor, las respuestas al entorno, las emociones y el aprendizaje, y la memoria.

¿Por qué usar alucinógenos?

Los alucinógenos se pueden usar en actividades espirituales, como producir "visiones" místicas, o simplemente inducir un desapego de la realidad. Escritores, poetas y artistas han usado alucinógenos y otras drogas a través de las décadas para encontrar inspiración.

En el siglo pasado, las drogas alucinógenas y disociativas se han utilizado para uso social o recreativo.

Las personas pueden usar alucinógenos para lidiar con el estrés o para tratar de lograr un estado de ánimo iluminado. Algunos pueden tomar drogas alucinógenas simplemente para escapar de los problemas de la vida o para aliviar el aburrimiento. Las personas que tienen problemas mentales o emocionales pueden probar los alucinógenos simplemente para alterar su estado de ánimo.

Riesgos potenciales del uso de alucinógenos

Las personas que pueden no estar bien arraigadas en la realidad pueden experimentar viajes a un mundo de alucinaciones, pero potencialmente pueden ponerse en una situación peligrosa, psicológica o quizás físicamente.

Los alucinógenos, por definición, pueden causar que las personas que los usan tengan distorsiones extremas de su percepción de la realidad. Pueden tener experiencias que se ven, sienten y parecen muy reales, pero de hecho, la situación solo está en su mente. En otras palabras, escapan por completo de la realidad. En casos extremos de estar en un estado disociativo, la persona puede participar en conductas peligrosas.

Poco se sabe sobre los efectos a largo plazo de los alucinógenos . Los investigadores sí saben que los usuarios de ketamina pueden desarrollar síntomas que incluyen úlceras en la vejiga, problemas renales y mala memoria.

El uso repetido de PCP puede ocasionar efectos a largo plazo que pueden continuar durante un año o más después de que se detenga el uso, como problemas del habla, pérdida de memoria, pérdida de peso, ansiedad o depresión y pensamientos suicidas. La sobredosis con PCP puede provocar convulsiones, coma o la muerte, especialmente cuando se mezcla con otras drogas. Otros posibles efectos a largo plazo después del uso a largo plazo pueden incluir psicosis o flashbacks que conducen a problemas de percepción.

Usos terapéuticos de los alucinógenos

Los alucinógenos han sido investigados como una forma de terapia para algunos. Aunque actualmente no están aprobados para dicho uso, algunos fármacos alucinógenos han sido probados científicamente para ver si pueden tener efectos terapéuticos sobre quiénes son las personas que experimentan distorsiones perceptivas, como el trastorno bipolar, la esquizofrenia, el trastorno obsesivo compulsivo y la demencia.

Según los Institutos Nacionales de Salud y el Instituto Nacional sobre Abuso de Drogas, informes anecdóticos y pequeños estudios han sugerido que la ayahuasca podría ser un tratamiento potencial para los trastornos por consumo de sustancias y otros problemas de salud mental, pero ninguna investigación a gran escala ha verificado su eficacia.

> Fuente:

> Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas. "Alucinógenos y drogas disociativas". Serie de informes de investigación actualizada en enero de 2014

> Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas. "Alucinógenos". Datos del medicamento Enero de 2016

> Barbosa P, Mizumoto S, Bogenschutz M. "Estado de Salud de los Usuarios de Ayahuasca" Análisis y Prueba de Drogas Julio de 2012