Cómo hablar con su cónyuge
A lo largo de su matrimonio, habrá momentos en los que tendrá que tener conversaciones "imprescindibles".
Estas son las conversaciones de las que quizás ambos no quieran hablar. Estas son conversaciones sobre problemas y situaciones difíciles. Estas son las conversaciones que pueden hacer que ambos estén enojados, a la defensiva, tristes y lastimados.
Pretender que no hay nada malo los mantendrá a ambos caminando sobre cáscaras de huevo y finalmente hará que su matrimonio falle.
Tener la conversación difícil muestra que te importa lo suficiente acerca de tu cónyuge y tu matrimonio para tener la conversación.
Aquí hay consejos y estrategias cuando tiene que tener esa conversación difícil: LA plática.
No dejes de tener esa conversación difícil
- Mire sus expectativas: si espera que la conversación vaya mal, lo hará. Si asumes que tener una gran charla empeorará la situación, probablemente lo hará. Necesita definir sus expectativas de la conversación y pensar en términos positivos.
- Sepa por qué quiere hablar: ¿desea hablar con su cónyuge sobre un tema difícil para comprender mejor la perspectiva de su cónyuge sobre el tema? ¿Quieres aclarar un malentendido? ¿Necesita confrontar a su cónyuge acerca de una sospecha de mentira o comportamiento hiriente? ¿Le preocupa su nivel de intimidad entre sí y quiere estar más cerca de su cónyuge?
- Acepte que probablemente será una conversación estresante: aunque no quiera que ninguno de los dos se sienta estresado, lastimado o enojado por la conversación, es importante darse cuenta de que ambos pueden estar a la defensiva y emocionales mientras habla.
Maneras de abordar la conversación difícil
- No diga "Tenemos que hablar" o "¿Podemos hablar?" - Comience su conversación con una declaración que reconozca que el tema es difícil, sensible, de confrontación o sensible. Aclare que sabe que tiene diferentes perspectivas y que desea trabajar en conjunto para tener una mejor comprensión de esas perspectivas.
- Sugerencias para comenzar la charla: "He estado pensando en ...", "¿Qué piensas de ...", "Me gustaría hablar de ...", "Quiero tener una mejor comprensión" de su punto de vista sobre ... "No andar por las ramas. Mantenlo simple. Permanecer en el tema.
Cuándo y dónde tener la conversación difícil
- No manipule a su cónyuge: no invite a su cónyuge al cine cuando realmente planee tener "la charla" en un restaurante. Se honesto, no manipulador.
- Momento de la conversación: elija el momento adecuado para la conversación. No le pida a su cónyuge que acuerde un momento para tener la charla sin haberse calmado primero. No tenga una conversación difícil antes o después del sexo.
- No espere tener la charla de inmediato: es importante que le dé tiempo a su cónyuge para que piense sobre el tema del que desea hablar, pero esto no debe posponerse por un tiempo prolongado. Mencione que le gustaría tener la discusión dentro de las 48 horas.
- No atrape a su cónyuge: si tiene la conversación en el automóvil o en un avión, etc. está atrapando a su cónyuge.
- Acuerde dónde hacer la charla: a menos que su cónyuge acepte tener la charla en un lugar público como un restaurante, lleve a sus hijos a una niñera y hable en casa.
Estrategias para usar durante la conversación difícil
- Muestre respeto por su cónyuge: no hable con su cónyuge. No suponga que su cónyuge sabe de lo que desea hablar. No interrumpa cuando su cónyuge está hablando.
- Tenga cuidado con la comunicación no verbal: mantenga contacto visual. Reconozca lo que escucha con la comprensión de que el reconocimiento no es necesariamente un acuerdo.
- Esté preparado: haga una copia de seguridad de sus inquietudes, pensamientos e ideas con investigaciones y hechos. Mantenga su conversación sobre el tema que acordó discutir. No hables sin parar
- Llegue a un acuerdo con el que ambos puedan vivir: luego, establezca un momento para hacer un seguimiento para ver cómo ambos están lidiando con el problema.
- Sepa cuándo obtener ayuda: si el problema o la situación continúa creando problemas en su matrimonio, es posible que los dos necesiten un consejero o un mediador.